Nueva jornada de gastronomía y salud, organizada por el Colegio de Médicos de Cantabria

El doctor Juan Gondra dice que para hacer ejercicio físico “hay que comer bastante, más que lo que come la población sedentaria”

El vicepresidente para Áreas Académicas del Colegio de Médicos de Vizcaya y profesor de la Facultad de Medicina y Enfermería de la UPV/EHU, Juan Gondra del Río, ha protagonizado una nueva charla dentro de las Jornadas de Gastronomía y Salud que organiza el Colegio de Médicos de Cantabria, en la que ha hablado sobre “La alimentación e hidratación en el ejercicio físico”.

En su intervención, Gondra del Río ha recomendado a los deportistas tomar bebidas a una temperatura ambiente, “ya que cuando se toman bebidas muy frías se incita a beber más”. En su opinión, “no se tiene que beber demasiado frío ni demasiado rápido”, e insistió que “normalmente y en muchos casos hay que beber agua, solamente agua, que es lo más recomendable, a pesar de que las casas comerciales insistan en otras bebidas”.

No obstante, ha apostado por añadir en algunas ocasiones “algo de sodio y glucosa” para que en competiciones de más de tres horas se evite la deshidratación, así como poder tomar zumos de frutas. Asimismo ha considerado como un error “gravísimo” en los deportistas aficionados beber agua con gas, pues está considerada como una bebida carbonada, y lo que produce es una sensación de plenitud gástrica mucho antes que el agua normal.

Este experto, que ha sido presentado en esta actividad por el presidente del Colegio de Médicos de Cantabria, Javier Hernández de Sande, ha recalcado que para hacer ejercicio físico “hay que comer bastante, mucho, más que lo que come la población sedentaria”, pues hay que cubrir los requerimientos de energía y nutrientes.

También ha subrayado que la grasa es “imprescindible” para el cuerpo del deportista, aunque ha matizado que la grasa en exceso es perjudicial, de ahí que haya especificado que a cada deportista se le exige que esté en unos porcentajes, “no es lo mismo un remero que un maratoniano, por ejemplo.

Otras de las recomendaciones propuestas para los deportistas es que hay que buscar el mejor alimento y el mejor tolerado, aunque ha indicado que estas medidas hay que experimentarlas en la vida cotidiana “y nunca en las competiciones, porque seguro que nos equivocamos”.

Asimismo ha explicado que en la alimentación hay que comer por placer y no por obligación. “La alimentación es una obligación, pero también debe ser una devoción. Y esa devoción debemos equilibrarla, en cantidad y calidad, entre lo que nos gusta y nos satisface, y lo que nos conviene”, ha apuntado.

Durante su intervención ha destacado igualmente que ante los problemas de agotamiento, una vez pasados los 45 minutos de ejercicio duro, se recomienda tomar agua y comer plátano y “con esto podemos tirar”. “Es importante reponer energía cuanto antes”, ha asegurado el especialista

Se ha referido a que cuando un deportista tiene una dieta equilibrada completa y variada, no suele ser necesario utilizar complementos de vitaminas y minerales, aunque ha señalado que algunos deportistas se puede encontrar con déficit de hierro y con problemas de anemia, que a veces se producen el crecimiento de los adolescentes, por ingestas insuficientes, dietas vegetarianas, modas o alimentación erráticas, poca variedad de la alimentación, ingesta excesiva de barritas energéticas o dietas naturistas, entre otras cuestiones.

Juan Gondra del Río ha añadido que se debe ir hacia una medicina preventiva, por lo que ha remarcado que “educar en la cultura de la actividad física saludable y de la correcta alimentación es una de las inversiones más rentables en la medicina del siglo XXI”.

Además, ha considerado que en el deporte es importante que la dieta sea rica en potasio, reducida en sodio y recomendó comer mucha fruta. Y ha enumerado los errores más frecuentes tanto en los deportes como en la alimentación: la hidratación insuficiente, el exceso de grasas y proteínas, la ingesta excesiva en hidratos de alto índice glucénico, el reparto calórico desajustado, la falta de variedad de los alimentos y no comer los suficiente o hacerlo en exceso.

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