Un total de 36 psicólogos se encargan de gestionar las consecuencias psicológicas del suceso, las crisis agudas de ansiedad o el inicio del duelo
El Colegio Oficial de Psicología de Cantabria ha participado en el simulacro de emergencias “Cantabria 2017”, que ha organizado la Unidad Militar de Emergencias (UME) entre los días 3 y 7 de abril en la región, con la participación de 36 psicólogos que se unen a los casi 3.000 efectivos del ejército, fuerzas de seguridad y equipos de emergencias movilizados durante toda una semana.
Así, según ha destacado la Decana y coordinadora del Área de Psicología de Emergencias y Catástrofes del Colegio Oficial de Psicología de Cantabria, Aurora Gil, estos 36 profesionales han tomado parte durante tres días, desde el martes y hasta el jueves incluido, en este ejercicio, el más importante que organiza cada año la UME en nuestro país.
Un día después del inicio del simulacro de catástrofe que ha activado el grado de emergencia nacional de nivel 3 por inundaciones, estos psicólogos se han encargado de la atención específica a la población afectada, principalmente, a los familiares de las víctimas.
Al respecto, Aurora Gil ha explicado que se trata de un equipo de profesionales que conforman el Área de Psicología de Emergencias y Catástrofes del colegio profesional y que cuentan con formación especializada y específica para la intervención en situaciones de emergencia.
Uno de los objetivos de la labor que desarrollan los equipos de psicólogos en catástrofes como la que ha simulado es “modular” las consecuencias del suceso y ayudar a “enfocar” la espera y la incertidumbre de forma “adaptativa”, contribuir a incrementar la organización cognitiva y abordar el embotamiento en situaciones psicológicamente extraordinarias.
Gil ha subrayado que la participación de un profesional de la Psicología en una catástrofe de esta naturaleza es “imprescindible” para, entre otras cosas, manejar la crisis agudas de ansiedad que se puedan producir, gestionar desde un punto de vista emocional los sentimientos de “desesperanza e indefensión” y enfocar el inicio del duelo, en caso de que se hayan producido fallecimientos en el suceso.
La Decana del Colegio de Psicología recuerda que una catástrofe natural como la que se recrea en el ejercicio “Cantabria 2017” de la UME genera “situaciones psicológicamente extraordinarias”, en las que el trabajo del psicólogo es importante, por ejemplo, para enfrentar el inicio del duelo ante la pérdida de seres queridos.
También ha señalado la orientación a pautas y estrategias de afrontamiento “a medio y a largo plazo”.
Aurora Gil ha destacado que los 36 profesionales han participado en este simulacro integrados en los dispositivos de respuesta coordinados por la UME, lo que ha constituido “una oportunidad excepcional” para poner en práctica sus intervenciones en un ejercicio de “gran alcance” como el desarrollado en Cantabria.